En nuestro entorno somos bombardeados constantemente con gran cantidad de anuncios publicitarios, unos tiene mejor efecto de persuasión que otros. Según Von Mises en su obra de la Acción Humana la publicidad es necesaria para que el consumidor obtenga datos de los productos que se encuentran en el mercado y de ésta forma pueda elegir el precio que mejor le parezca.
Por otro lado se presenta cada cuatro años la propaganda electoral que no cumple con los principios básicos pues se abusa de ésta al ser excesiva y al ser modificada constantemente. Los candidatos gastan grandes cantidades de dinero en la publicidad, y el Estado en determinadas ocasiones ha proporcionado más dinero del debido para la propaganda electoral.
Con las llegada de Alfonso Portillo a Guatemala, grandes delitos y sucesos no del todo honestos han salido a la luz pública, como es el caso del dinero que se le proporciono a Colom en el 2003 para su campaña electoral. El caso fue olvidado y cerrado por los tribunales. Es increíble como es que los candidatos son como dicen "coyotes de la misma loma" pues no sólo se habla de este mal uso de dinero sino que también se considera que tanto Portillo como Colom tiene la misma suerte al ser tratados de forma "cariñosa" por la justicia del país.
Al parecer el presidente se ha olvidado de este regalito que le hizo Portillo para su campaña electoral en 2003 y argumentó que no puede opinar de la situación de Portillo porque no es digno de juzgarlo, claro, como él también tiene cola que le pisen mejor aplica el dicho: "Calladito me veo más bonito".
Pero bueno, como dice V en V for Vendetta el único culpable de lo ocurrido con el caso de Portillo y demás expresidentes corruptos y mediocres es cada uno de los individuos que con su voto le otorgan el poder a quienes no se lo merecen y quienes después hacen y deshacen lo que desean con los resursos del Estado.
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